Un sueño que no conté.

No sé por qué tampoco le he hablado de esto, supongo que tampoco me atreví. El otro día soñé con ella, con ella y con caballos. íbamos a montar, a dar un paseo, sacábamos dos caballos de sus respectivas cuadras, los preparábamos con sus monturas y demás... y cuando íbamos a salir del rancho y entrar en el pinar, nos pasaba por delante una chica del trabajo con la que nunca he hablado, pero que sé que está allí en mi cuartel, bueno pues esta chica nos pasó a galope con otro caballo y desapareció, pero el tuyo la siguió y cayó en un hoyo lleno de agua, tu conseguiste salir del hoyo pero el caballo se estaba ahogando, cuando yo llegué tu estabas arrodillada llorando e intentando ayudar al caballo, no me preguntes por qué pero le gritabas dandi... yo me bajé del mio, vinagre, que murió hace unos meses, y corrí hacia el rancho para buscar unos cabos llamar a una grúa o algo para sacar a dandi del hoyo, y cuando llegué de nuevo a donde tu estabas con dandi y con unos cabos para atar al caballo, recuerdo acercarme a ti, darte un abrazo y susurrarte, tranquila lokita, todo va a salir bien, y darte un beso, que aunque no te quitó el sofocón te tranquilizó un poco, me metí con el cabo en el hoyo y en ese momento me sonó el despertador y me devolvía a la realidad, eran las 6:30 am y tenia que levantarme para ir a trabajar.

Y ahora, en mi día a día, en mi realidad, sigo soñando con esa promesa que me hiciste de ir a contar estrellas con un saco de dormir a una playa desierta en primavera.

October Baby

October baby

Hoy he vuelto a pensar en ti, he vuelto a recordarte, a recordar tu calor, esa forma en que nos mirábamos cuando íbamos en mi coche, conduciendo hacia ninguna parte. He recordado un millón de hermosisimos momentos a tu lado, incluso cuando las cosas ya no estaban bien, y sabes... lo realmente bonito y hermoso de todo esto, de nuestra historia, de nuestra amistad, de nuestro amor... es que pasará el tiempo, y aprenderemos a que no duela, a verlo de otra manera, pero sé que siempre estaremos ahí el uno para el otro, es indudable, siempre te cuidé y traté lo mejor para ti, y sé que tú también buscaste siempre lo mejor para mi. 

Una película October baby para pensar en el sentido del amor, de la familia, de tener un hijo, y de cómo y cuánto pueden afectar nuestras decisiones y actos a otros. A valorar que el amor de unos padres no tiene límites y siempre velarán por la seguridad y bienestar de sus hijos aunque estos no lo vean así.

Pienso que todo el mundo busca enamorarse de un amor puro, infantil, espontaneo, humilde, y de verdad. Yo soy un afortunado porque me he enamorado dos veces, y porque me han querido mucho. 

Ahora estoy en una etapa de mi vida en que no tengo con quien compartir este tipo de emociones y sentimientos, pero no me preocupa tanto no tener con quien compartirlo, sino sentirme bien y feliz conmigo mismo, y sentirme realizado con lo que hago y soy, y aunque siempre es bonito tener a quien abrazar y a quien regalar ese amor y cariño... no tenerlo no tiene por qué ser una desgracia. La chica que me gusta no lo sabe, tampoco se lo quiero decir, bueno quiero que lo sepa, pero me da ese miedo estúpido de abrir el corazón, me da miedo... no sé exactamente de qué, pero el caso es que no me decido o no encuentro el momento para hablarlo y decirle lo que pienso al respecto y lo que quiero y empiezo a sentir. Por otro lado, y aunque creo que ya está más que zanjado, aprovecho que he sacado el tema para volver a decirle a mi ex, a la que me dirijia al principio, que siento mucho tanto dolor, que la quiero y siempre la querré, y que aunque no quiera vovler a tenerla como pareja, no quiero que desaparezca de mi vida, quiero poder abrazarla cuando lo necesite, y darle una de mis charlas reconfortantes.

Aún no está todo en su sitio, aún me quedan mil cosas por decir, hoy es uno de esos días que mis dedos se animan a escribir y tecleo lo que me va viniendo a la mente en el orden en que van llegando los pensamientos. He llorado con esta película, me ha tocado la fibra sensiblera, y me he acordado de ti olga, también he pensado en raquel... ahi si ella supiera cuánto la pienso... he pensado en mi madre, en mis futuros hijos, he imaginado mi vida futura... tanta incertidumbre en el futuro encuentro... a fin de cuentas todo se resume a vivir con amor, amante y enamorado, y ser feliz con las cosas que te deparan la vida, disfrutar de las pequeñas cosas, intentando ver las cosas positivamente, tratando de ser solidario, y teniendo que arrepentirse lo menos posible, tanto de lo que haces como de lo que dejas por hacer.

Déjate enamorar.

Sé sabio en el amor, y enamorarte de quien te quiere, de quien te quiere bien, de quien mira por ti, de esa persona que se desvive por ti y daría cualquier cosa por tu bien estar y felicidad.

No elegimos de quien nos enamoramos, o eso decimos, pero el amor ocurre entre dos, y uno puede negarse a ser enamorado o dejarse enamorar y seguir el juego.

Descubrirás cuando eso pase porque esa persona te hará olvidar problemas, el tiempo volará a su lado, te hará sentir bien, te dará paz, y estarás dispuest@ a dejar de lado algunas cosas tuyas de siempre por pasar un rato con esa persona, o hacer pequeños sacrificios (al principio), tan solo por estar a su lado un rato o unas horas, porque sabes que a su lado estarás feliz y alegre, y eso te acercará un poco más a ella/él.

Déjate enamorar de esa persona que te haga ser tu misma, sin complejos, sin tabúes, sin recelos y sin reproches. De esa persona con la que hagas cosas diferentes, con la que construyáis juntos, y con la que te haga soñar por las noches, y soñar una vida.

El amor no lo es todo, sentir mucho no fue suficiente, y el sexo es importante, pero no es lo único en una relación y no se debe fundamentar en este. 

Te quise como a nadie, si, pero no te respeté, intenté cambiarte, te reprochaba cuando eras tu misma, y nunca te hice sentir una princesa, siempre estabas de mal humor, incluso yo también, y cuando se va te maldices y decides echarla de menos o luchar por ella. Esto por desgracia sucede, a mi me pasó. El amor se deteriora si no se cuida, si no se da con la persona indicada a la que dar ese amor, o simplemente si cada uno busca algo diferente en su vida. 

Quien no arriesga no gana, por eso, dejate enamorar, No la amo, y no se lo diré hasta sentirlo y estar seguro de hacerlo, pero la quiero, por qué no intentarlo. Yo soy de esas personas que lo dan todo, que son diferentes, y no lo digo por plagio. Busco un amor de una noche, pero que sea eterno, una noche eterna, un amor eterno mientras dure, tan intenso como una noche, tan largo como pueda llegar a ser una vida.

Quiero jugar a hacer cosquillas en tu piel.

Quiero jugar a hacer cosquillas en tu piel.

No me pidas la vida,

yo solo quiero una noche.

No te encapriches ni me reproches, 

yo solo quiero ver amanecer

desde la parte trasera de mi coche.

Aún no es tiempo de amor, 

eso ya llegará si el tiempo lo quiere.

Ahora es tiempo de follar y disfrutar, 

pasemos tiempo juntos y hagamos cosas

y si el amor quiere 

tocará en la puerta del destino de nuestras vidas.

No quiero saber de tu vida, 

quiero saber de ti, 

no quiero promesas ni regalos

sino beberme tu cuerpo

comer un par de helados

fumar un cigarrillo y

volver a hacerte el amor.

Quiero noches de esas que acaban 

con el día siguiente

en la ventanilla llena de vaho 

con una promesa ya rota

y unas caricias de amor.

Noches de esas en las que una mirada 

es un discurso lleno de intenciones.

Una noche de esas en las que 

una sola noche no es suficiente 

y hay que volver a repetir 

para mitigar la lujuria

de los cuerpos jóvenes,

en eso del instinto

del amor juvenil.

Una noche de esas en las que justo antes del amanecer, 

y sin venir a cuento,

alguien dibuja un corazón en la ventana.

Una noche en la que un corazón es una promesa que no debe hacerse.

Una promesa de esas que cambian miradas y gestos.

Un puro destello de espontaneidad 

cargado de intenciones intrínsecas al hecho ya ocurrido

del sexo sin amor, del sexo con quien se quiere, 

del sexo a quien se recurre. 

Y es que no te quiero en mi vida. y me faltaría decirte aún, vida mía. Porque un te amo es aún prematuro, demasiado diría, pero un te quiero, es sin duda lo que siento. La quiero. La quiero en mi vida, quiero verla reir a todas horas con esa sonrrisa improvisada y femenina que me pone cuando destapa mis pensamientos, quiero seguir teniendo esas charlas que tenemos, seguir dando esos paseos, Que me siga embriagando su mirada, y que siga buscándome para hacer cosas.

Y esto va

Un sofá es el mejor mirador, insisto,

puedes mirar sin ser visto.

Y esto va por los adolescentes, por esa virtud del vivir, de vivir el momento, de saborear la vida, de no pararse a pensar, de mirar de reojo al peligro, a las preocupaciones, a las responsabilidades. Por esa virtud de mirar de frente al descontrol de las hormonas, el sexo y desenfreno.

Y esto va por el asiento trasero de los coches, esos lugares donde aguardan millares de historias de enamorados, de aventureros y aventuras, amantes, infieles y amaneceres perdidos. Cachetadas que son caricias y posturas imposibles, va por el sexo, por el amor, por esa dicha de la gratitud que da el calor de otra piel que no es la tuya, y el calor del sudor de otros poros en los tuyos. Esos suspiros enamorados en un cuerpo sin amor, en un momento de extenuación física en el que sigues dándolo todo al placer, al momento, a las sensaciones, a esos besos húmedos, al tacto de las lenguas, de las manos, de las piernas, de un torso desnudo...

Y esto va por las locuras de los adolescentes, por esos baños en la noche, en invierno, en la playa, sin ropa para cambiarse, sin toalla para secarse, y sin más que el otro cuerpo para calentarse. Por esos momentos en los que una noche fría y sobria termina en un amanecer precioso, lleno de sensaciones nuevas y ebrio de alcohol y sexo en el asiento de atrás, entre besos y caricias.

Esto, va por esas acciones incoherentes, por esas canciones que incitan al sexo que no al amor, y por esas otras que incitan al amor que no al sexo, y finalmente a aquellas que incital al amor y también al sexo, a bailar pegados, a besar un cuello, a tocar una pierna, y a enredar los brazos por debajo de la ropa. Va por esos temas increíbles que describen a la perfección eso que se quiere expresar, eso que se quiere contar, eso que todos viven, que todos han sentido y que muy pocos se atreven a decir.

https://www.youtube.com/watch?v=uu5y8aCiRwU

https://www.youtube.com/watch?v=HvEzaLp_cEs

https://www.youtube.com/watch?v=Sog6M69o2d0&list=PLSSZgdZJ0IOTzLkF0eCPxA2Qyx4EnvFJb

https://www.youtube.com/watch?v=FLt3iAc2qig&list=PLSSZgdZJ0IOTzLkF0eCPxA2Qyx4EnvFJb

Una tarde en el sur. Tu cuerpo, mi península

Vuelvo a tener ganas de escribir, a todas hora me vienen versos a la mente, pero cuando me enfrento al papel en blanco de mi pantalla siempre se diluyen, nunca consigo esa perfección de la improvisación del momento cuando no tengo donde guardar las palabras.

La península de tu cuerpo es España,

mi tierra, mi amor.

El sur mi hogar con sus playas

y tu en ellas mi utopía.

Tus piernas con la piel de gallina.

El viento frío de marzo.

Voy a empezar por el sur,

tus huellas en la arena,

tus pies descalzos 

y mi vista en tu cuerpo

desearía echarte el lazo.

Amarrarte mis manos 

para subir por tus rodillas,

llegar a Extremadura

y calentar tu piel morena 

es el valle del Jerte en primavera

de frío en la orilla.

Una flor de cerezo.

Mi sudadera tapa hasta tus muslos

tu vientre plano, 

Madrid es capital 

dónde quiero posar mis manos.

Quiero descubrir mi España

por debajo de mi ropa, 

Castilla es nueva con su meseta

y tus senos bajo esa camiseta.

Quiero que me lleves de la mano a Zaragoza

que sean tus dedos mi plano

mi topografía, tu cuerpo goza,

una caricia silenciosa.

Subir mi lengua hasta Cantabria

es besar tu cuello,

beber de tu boca, 

tocar tu pelo

conquistar tu roca,

posar mi nariz en la tuya,

mirarte cerca,

suspirar tu aire

ver tus frías aguas 

y bañarme en ellas

bajar de nuevo al sur

al calor de Sevilla, 

a su río 

estudiar tu geografía

y deleitarme con el verde de Asturias

en tu valle del guadalquivir.

Dónde lo más hermoso

no es otra cosa que

dejarse llevar y vivir,

dejar de ser cobarde, y sentir.