viernes, 23 de septiembre de 2011

Tú.... te quiero, te amo.... y me encantas ;)


A veces en la vida ocurre algo que te cambia por completo, es algo mágico e inesperado que te golpea y entra de lleno en ti cambiando tu realidad, tu forma de ser y de pensar. A partir de ese momento ya no puedes ser el que eras porque te has transformado en alguien completamente distinto. Eres otra persona, una nueva, transformada, mejorada...

A veces, en la vida, un angel caido se te presenta delante y sin saber cómo consigue encauzarte y enamorarte, te ciegas de ese angel perdido del amor, y a partir de ahora todo se vuelve distinto,  porque aunque a veces no se vea la salida o el camino se tuerza, se de verdad existe el amor del angel, ese capaz de volver la luna de azul, si de verdad es sincero el sentimiento, todo será de colores para ambos.

Te Quiero porque eres mi angel del amor, eres mi novia, mi rollete, mi a veces folla amiga, mi putita, mi mujer... y por si acaso también eres mi amante. Te Quiero porque si tú eres Sol, yo soy Fa. Te Quiero porque eres mi O-scar. Te Quiero porque te hecho de menos a cada momento, todo el tiempo, porque quiero estar contigo, porque a tu lado soy feliz. Te Quiero porque me complementas.

Te quiero por tus numerosas virtudes, por hacerme reir, por levantarme siempre el ánimo, por ser infatigable. Te AMO por amarme tú, porque eres siempre tan buena conmigo y siempre piensas ante en mi y después en ti. Te Quiero porque me haces bien, porque a tu lado soy mejor, porque me esfuerzo por serlo, porque me entiendes, porque me apoyas, porque quieres lo mejor para mi, porque mis ilusiones se transforman en las tuyas, porque te alegra mi alegría y mi felicidad, porque me das bienestar, tranquilidad y paz.

Y... si por casualidad lo habías olvidado... ME ENCANTAS !!! Y... TE AMOOOOOOOOO !!!!!!!!!!!!!!!



sábado, 3 de septiembre de 2011

El AMOR


«El amor es paciente, es benigno, el amor no es celoso ni envidioso, el amor no es fanfarrón ni orgulloso, no es arrogante ni egoísta ni grosero, no exige que todo se haga a su manera, no es irritable ni quisquilloso, no guarda rencor y casi ni se da cuenta cuando los demás hacen algo mal. No se alegra de las injusticias y se regocija cuando se impone la verdad.»




El amor es paciente. Es capaz de soportar la espera o las demoras sin alterarse ni enojarse. Puede perseverar con tranquilidad aunque enfrente dificultades. Es capaz de tolerar las circunstancias difíciles. Es tolerante y no se queja ni pierde los estribos aunque lo ofendan, provoquen o molesten.

El amor es benigno. Es de carácter generoso y cálido. Manifiesta compasión. Se compadece del sufrimiento de los demás y manifiesta el deseo de ayudarlos. Demuestra cortesía y se interesa por los demás.

El amor no es celoso. No alberga suspicacia hacia la influencia de un rival o competidor. No sospecha de los demás con relación a un ser querido. No exige una lealtad desmedida.
El amor no es envidioso. No se resiente ni tiene el desagradable sentimiento de desear el éxito, buena fortuna, cualidades o posesiones de otra persona. No se compara con los demás.

El amor no es fanfarrón. No se jacta. No dice ni escribe cosas que lo ensalzan a uno mismo. No se refiere de un modo fanfarrón a sus posesiones o logros.
El amor no es orgulloso. No alberga sentimientos de superioridad ni una actitud altanera de creerse —a menudo sin razón— mejor que los demás. No tiene una opinión exagerada de la propia valía o habilidades.

El amor no es arrogante. No se conduce con aires de superioridad.
El amor no es egoísta. No se preocupa de sus propios intereses, necesidades y deseos mientras que hace caso omiso de los ajenos.

El amor no es grosero. No es maleducado. No es desagradable en su forma de conducirse o actuar.

El amor no exige que las cosas se hagan a su manera.

El amor no es irritable ni quisquilloso. No se fastidia o contraría fácilmente. No es propenso a enojarse o alterarse o a provocar esas emociones en otros.

El amor no guarda rencor; no se aferra al resentimiento o la animadversión.

El amor nunca se alegra por las injusticias que sufren otros. Se alegra cuando la verdad sale a la luz y resuelve esas situaciones.




El niñito miraba al abuelo escribir una carta.

En un momento dado le preguntó:- ¿Abuelo, estás escribiendo una historia que nos pasó a los dos? ¿Es, por casualidad, una historia sobre mí?
El abuelo dejó de escribir, sonrió y le dijo al nieto:- Estoy escribiendo sobre ti, es cierto. Sin embargo, más importante que las palabras, es el lápiz que estoy usando. Me gustaría que tú fueses como él cuando crezcas.
El nieto miró el lápiz intrigado, y no vio nada de especial en él, y preguntó:

- ¿Qué tiene de particular ese lápiz?

El abuelo le respondió:


- Todo depende del modo en que mires las cosas. Hay en él cinco cualidades que, si consigues mantenerlas, harán siempre de ti una persona en paz con el mundo.

Primera cualidad: Puedes hacer grandes cosas, pero no olvides nunca que existe una mano que guía tus pasos. Esta mano la llamamos Dios, y Él siempre te conducirá en dirección a su voluntad.



Segunda cualidad: De vez en cuando necesitas dejar lo que estás escribiendo y usar el sacapuntas. Eso hace que el lápiz sufra un poco, pero al final, estará más afilado. Por lo tanto, debes ser capaz de soportar algunos dolores, porque te harán mejor persona.




Tercera cualidad: El lápiz siempre permite que usemos una goma para borrar aquello que está mal. Entiende que corregir algo que hemos hecho no es necesariamente algo malo, sino algo importante para mantenernos en el camino de la justicia.

Cuarta cualidad: Lo que realmente importa en el lápiz no es la madera ni su forma exterior, sino el grafito que hay dentro. Por lo tanto, cuida siempre de lo que sucede en tu interior.


Quinta cualidad: Siempre deja una marca. De la misma manera, has de saber que todo lo que hagas en la vida, dejará trazos. Por eso intenta ser consciente de cada acción.






Y ahora un par de declaraciones de amor, porque te amo y por ti es todo lo que hago, no son mias pero ahí va mi mensaje: 




"Si tan solo pudiera amarte,
 quererte e idolatrarte,
 si tan solo me dejaras llegar a ti
 para detenerme en tu ternura
 y gozar de tu dulzura,
 si me dejaras entrar en tus sueños de placer...
seria tu esclavo de amor para hacerte feliz".







Si el hombre pudiera decir lo que ama,
si el hombre pudiera levantar su amor por el cielo
como una nube en la luz;
si como muros que se derrumban,
para saludar la verdad erguida en medio,
pudiera derrumbar su cuerpo,
dejando sólo la verdad de su amor,
la verdad de sí mismo,
que no se llama gloria, fortuna o ambición,
sino amor o deseo,
yo sería aquel que imaginaba;
aquel que con su lengua, sus ojos y sus manos
proclama ante los hombres la verdad ignorada,
la verdad de su amor verdadero.

Libertad no conozco sino la libertad de estar preso en alguien
cuyo nombre no puedo oír sin escalofrío;
alguien por quien me olvido de esta existencia mezquina
por quien el día y la noche son para mí lo que quiera,
y mi cuerpo y espíritu flotan en su cuerpo y espíritu
como leños perdidos que el mar anega o levanta
libremente, con la libertad del amor,
la única libertad que me exalta,
la única libertad por que muero.

Tú justificas mi existencia:
si no te conozco, no he vivido;
si muero sin conocerte, no muero, porque no he vivido.