Que no sé cómo decírtelo, que he venido a quedarme contigo, a tu lado, a apoyarte en todo, a cuidarte, a mimarte cuando haga falta, a luchar y a apostar por esto, por nosotros, me gustaría tanto verte feliz, y formar y ser parte de esa plenitud y felicidad...
Ambos, los dos, tenemos unos carácteres fuertes y difíciles de llevar. El tiempo, el trabajo,  los estudios, y la sociedad juega y apuesta en contra nuestra. Como he dicho antes,  he venido a quedarme contigo, a entregarme, a darte las llaves de mi ser y poder de partirme la vida. Creo que eso es depositar mucha confianza e ilusión en alguien y en algo, algo atemporal, porque como dice marwan y hemos adoptado nosotros :"me da igual un día, un año, un siglo..." aunque si tengo que escoger, mejor una eternidad.  Te quiero pequeña

Esto es algo que escribí hace unos días y que no pude publicar en su momento. Creo que fue el lunes 18, hace 6 días

Acabamos de romper, de mandar al carajo la relación y me parece injusto tu comportamiento.  Porque admitido que el fallo fue mio, y que la cago constantemente,  no entiendo que las cosas se queden a medias, no entiendo que juzgues mi manera de llevar las cosas sabiendo desde hace tiempo que soy así, y aun así seguir queriendo algo conmigo y ahora romperlo por eso, porque supone un problema o una carga. No entiendo que hace tres días querías dormir conmigo, y que echaras de menos alguien que quisiera despertar contigo,  y ahora es "no quiero saber nada de ti".
Y me da mucha pena, porque no podre cumplir esas cosas que "te debo" cuando de verdad quiero hacerlas. Y me da pena porque de verdad me gustas, y me importas.

simplemente todo se termina

Porque sí lo intente de verdad, porque mi manera de intentarlo ha sido ir a verte cada día estando mal con una sonrisa en la cara, y con mi total disposición para ti, hablando bien, pasando página de ese fallo, de esa cagada, de esas mentiras, guardándome mis movidas, dejándote tu espacio...

Porque nunca he querido hacerte daño, ni ponerte de excusa, solo he querido pasarlo bien contigo, disfrutar cada minuto que he pasado a tu lado, y ahora siento vacío, faltas tú en tu sitio adentro mía. No habré sabido escucharte, entenderte, decirte las cosas, o simplemente estar... Pienso que se han sacado las cosas de su sitio, todo se ha magnificado, y nosotros hemos sido los perdedores. 

Porque si es verdad que tengo mil cosas que decirte, tengo que decirte a cada segundo que te quiero, tengo que pedirte a cada segundo perdón por haberte mentido y por no haber sabido simplemente estar, y tengo que gritarte gilipollas a cada segundo porque estoy furioso, porque siento que hemos perdido algo que podría haber seguido y que ya, apenas empezado, estaba infectado y podrido... Que yo sólo quería formar parte de tu día a día, tener la oportunidad de dormir acurrucado en ti y oler tu pelo hasta quedarme dormido para poder despertar a tu lado. Porque solo te pedía ser importante para ti, y que me dieras un sitio que fuese mío. Siempre me quedarán mil cosas que decirte, mil cosas que hacer contigo, y mil cosas que callar cuando te tengo delante y discutimos y hechas tanto genio que tienes. 

Porque es cierto que ya no quiero nada de ti, bueno no, vuelvo a mentir, lo quiero todo de ti, pero no así, no me merece la pena estar peleado contigo, estar triste, estar apagado y sin ganas de nada y no tener ni un ápice de felicidad en mis días por estar mal contigo, se supone que tu debías ser un complemento, algo positivo, algo que sumara, alguien con quien avanzar. Soy consciente de que por mucho que hablemos, por mucho que escriba, por mucha música que comparta... todo me seguirá recordando a ti, siempre tendré ganas de verte, de hablarte, de seguir un poco más...

Vivir la vida, disfrutar las pequeñas cosas y hacer de ellas la fuente de la alegría y de la felicidad diarias. Que te levanten de la cama en la siesta después de no haber pegado ojo en toda la noche y encontrarte un documental sobre la vida de Paco de Lucía y emocionarte una vez más con su música, con su testimonio de vida, con su genialidad para la guitarra, y disfrutarle después de muerto. Enterarme de que el cantante de rap que mas me gusta saca disco nuevo y que es un pelotazo y hartarme de escucharlo sin cansarme. 

Luchar un poco por una cima, cercana o lejana y disfrutar luego en la cumbre, y descansar allí todo el tiempo que se requiera, sin tener en cuenta el tiempo.

Vivir al margen de la sociedad, de sus reglas, de sus horarios, de sus prisas...

Quitarte algo de tu tiempo para tener la oportunidad de conocer a alguien, es algo que no tiene precio.

Pasar un rato con los amigos de siempre, con esos que, a pesar de los años, de la vida, del tiempo que cada uno se pierde del otro en su propia vida, en su yo, me, mi, conmigo... sigue estando ahí, y siempre te da alegría verle, contarle tus cosas con total confianza... eso tampoco tiene precio...

Y es que perdería mi tiempo contigo porque al estar contigo, te estaría conociendo un poco más, y ese tiempo no sería perdido sino compartido y por tanto ganado. Perdería mi tiempo leyendo un buen libro. Perdería mi tiempo escuchando música. Perdería mi tiempo practicando algún deporte. Aprendiendo a tocar algún instrumento. Cantando contigo una canción antigua que ambos conocemos. Manteniendo una buena charla. Jugando una partida de billard o a la play station. Viendo un partido de futbol. Llendo al cine a ver una peli. Tomando el sol en la playa. Dando un paseo.

No nos engañemos señores, esto no va dirigido a nadie en concreto sino a todos y cada uno de esos que son mis amigos, a los más allegados y a los nuevos, a los Amigos con mayúsculas y a los colegas, y a todas esas personas con las que estoy dispuesto a compartir mi preciado tiempo porque las considero personas interesantes, dignas de mi confianza y de mi tiempo, a ustedes deciros que las cosas que se dan de corazón son gratis, y son las mejores cosas que puede darte la vida.

Una noche caliente.

Comenzar la noche jugando una inocente partida de billar, dos amigos, una botella de vino dulce, la mesa de billar, el juego, y toda la noche por delante para nosotros. 

Con la charla como excusa y entre jugada y jugada, nos sentamos en el sofá a tomar un trago de vino y comienzo a jugar con el cordón de la capucha de mi sudadera que ella lleva puesta. Comienzan las risas, los mordiscos, el juego del tonteo... y de ahí dimos paso a los lametones, los besos y las caricias, todo un buen preliminar de sexo, sentada a horcajadas sobre mi, viéndonos, besándonos, tocándoos... teníamos que irnos y al levantarnos los juegos se trasladan a la mesa de billar, una fantasía creo que de ambos...

                                      

La empujo sobre la mesa y empiezo a besarla y a tocarla desde detrás, esta posición me pone a mil y noto que ella me responde, le acaricio la espalda, los hombros, la beso en el cuello, por detrás de la oreja y noto su piel erizada desde la nuca hasta las nalgas, tapadas con las mayas de atletismo... le doy la vuelta, la beso, la cojo en brazos y la tumbo en la mesa, le subo la camiseta hasta taparle los ojos, le bajo las mayas hasta justo por encima del pubis y comienzo a lamer, besar y acariciar todo su cuerpo, le suelto el aliento recorriendo su abdomen, subo mis manos por sus pechos.... y me dejo embriagar por su olor, me dejo llevar por la situación, y me rindo a la lujuria de las hormonas de los adolescentes.

Una canción

Toda buena canción lleva detrás una buena historia, del mismo modo que toda historia que merezca la pena vivir, contar, narrar, escribir, relatar... tiene asociada una canción.

Una canción que se pone de moda, o que sencillamente entusiasma a uno, a dos, a una pareja, a un grupo... una canción que significa algo para alguien, y una canción que jamás aborrecerás por más que la escuches.

La canción que sonaba cuando diste tu primer beso, esa canción con la que te declaraste o con la que pediste disculpas, esa canción del campeonato de tu vida en el que lograste éxitos importantes y que bailaste hasta el amanecer. O esa canción que ponías y susurrabas a tu novia o mujer cuando estabas tierno. O esa otra canción que os ponía a mil. O esa otra que usabas para hacer el amor, o una que siempre usas para entrenar porque te motiva como nadie y como ninguna otra cosa. Siempre hay una canción para cada momento, una canción que expresa exactamente lo que quieres decir o necesitas escuchar.

Esa canción formará parte de tu vida y de tu historia vital, te gustará cantarla y tocarla, y nunca la cambiarias si sonara en la radio. Es una de esas canciones que te hace subir el volumen del audio y cantar a voces. Te hace recordar y te alegra el día. Y eso, no tiene precio.

prueba de fondo (trail)

Cuando se empieza un ultra trail, es igual que cuando se empieza cualquier otra prueba de larga distancia, conlleva meses, años de preparación física, mental y emocional, aunque los deportistas no estamos especialmente entrenados en esta ultima... siempre nos derrumbamos y nos emocionamos cuando cruzamos la meta. el caso es que sabes como llegas a la prueba, tras esa dura y larga preparación, sabes que estás preparado, has entrenado mucho y llegas con mucha ilusión, dispuesto a sufrir y a disfrutar, pero sobre todo a sufrir, porque sabes que será largo y duro, el deportista se caracteriza porque llegados a cierto nivel, a cierto punto... ese sufrimiento gusta, y se hace adictivo. Bueno continuo que me voy por las ramas, el caso es que sabes cómo empiezas una prueba, pero no sabes cómo vas a terminarla, o si siquiera llegarás a la meta, y más aún cuando se trata de una prueba de larga distancia, y llamo larga distancia a todo aquello que se tarda mas de dos o tres horas en finalizar... ya sea escalar, hacer una ruta de senderismo, una travesía a nado, una ruta ciclista, corriendo, piragüismo.... 

Llega un momento a partir de cierto tiempo que el músculo cambia su forma de trabajar y de obtener energía. El llamado muro, dejamos de tirar de azúcares, glucógeno, en eso en lo que se convierten los hidratos y los azúcares de las frutas y las vitaminas... y empezamos a tirar de grasas y de donde sea que haya un mínimo de energía de la que tirar para satisfacer la necesidad de trabajo de los músculos y darles alimento.

Llega un momento en que la prueba, es esfuerzo realizado... deja de ser deporte y empieza a ser una hazaña épica, digna de héroes. El entrenamiento es importantísimo. Si bien es cierto que el 80% es mental y que hay que tener muy claro y firme lo que se quiere y a lo que se va... el físico es primordial. La capacidad de sufrimiento, de subir a un pulso aeróbico, de saber cuando hidratarse, cuando comer, cuando meterse sales, vitaminas, magnesio...durante el recorrido... forma parte de la prueba y del entrenamiento de quien quiere hacer carreras de fondo.

Correr por terrenos verdes, o áridos en los que el paisaje te evade de la sensación de estar corriendo, del ritmo, de la respiración... y te hace pensar sólo en el recorrido, en donde pisar para no torcerte un tobillo o no resbalar. Que te hace tener la sensación de estar flotando... y donde conectas completamente con tu yo, y con con el entorno... no tiene precio, es una sensación indescriptible e invito a todo el mundo que le guste el deporte y en especial correr a que lo pruebe, pues no quedará defraudado. Salir del bullicio del tráfico, de la gente, de semáforos, motoristas.... bendita locura la nuestra a los que viajar una hora para correr, es lo mejor que podemos hacer.